Presidencia de México del G-20: labores de diálogo y consulta rumbo a la cumbre de Los Cabos

Una de las responsabilidades de México como Presidente del G-20 es promover el diálogo y la consulta con los países que no son miembros del G-20, con las organizaciones internacionales y regionales y con los distintos grupos de la sociedad civil.

Cabe recordar que el G-20 es una agrupación intergubernamental que reúne a las principales economías, que tiene representatividad de países desarrollados y emergentes, y que a diferencia de otras agrupaciones no tiene un secretariado permanente. Cada año, la Presidencia en turno se encarga de las labores de difusión de las actividades del G-20, tales como las prioridades de la agenda, el calendario de reuniones y actividades, y la organización de los grupos de trabajo.

Por ello, México, desde que asumió la Presidencia del G-20 en diciembre del 2011, viene realizando diversas actividades para establecer y difundir las prioridades de la Presidencia de México del G-20 y para promover el diálogo productivo, transparente, abierto e incluyente con los distintos grupos de la sociedad civil.

La labor de divulgación comenzó el 13 de diciembre del 2011, en la clausura del seminario G-20 “Los Retos Actuales para el Crecimiento Económico Mundial” ante representantes de los países miembros del Grupo, de la comunidad diplomática, de la comunidad académica nacional e internacional, de empresarios y de directivos de organismos internacionales. México, desde un inicio, mostró su apertura al presentar de forma clara y transparente las prioridades de la Presidencia de México para el G-20, los grupos de trabajo encomendados a los ministros de Finanzas y a los Sherpas, los objetivos de cada grupo, el calendario de actividades, todo esto enmarcado en el documento de discusión distribuido en el sitio web de la Presidencia de México del Grupo de los 20.

Las labores de divulgación y consulta de la Presidencia de México del G-20 son un trabajo de equipo. En este proceso se ha efectuado una importante labor de coordinación entre las distintas entidades del sector público que están participando en el proceso. Así, diversos funcionarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), de la Secretaría de Relaciones Exteriores y de otras dependencias han participado en un importante número de foros para difundir las prioridades de la agenda. Se han organizado diversos encuentros y seminarios con organizaciones no gubernamentales, con agrupaciones empresariales y del sector financiero, y con el sector académico para interactuar y dialogar respecto de las prioridades de la agenda de México del G-20.

En particular, la SHCP ha participado en foros internacionales, seminarios, en numerosas entrevistas con medios de comunicación y en reuniones con líderes de opinión. Cabe recordar que el detonador de la creación del G-20 a nivel de líderes fue la crisis económico financiera del 2008-2009, por consiguiente, la agenda del Grupo tiene un gran componente económico-financiero. En este contexto, la SHCP efectúa una labor de coordinación que incluye un amplio diálogo con las autoridades financieras de todos los países G-20, con las cabezas de los grupos de trabajo, con los directivos de los organismos internacionales, y con una amplia gama de actores involucrados. Una importante tarea de la SHCP es servir de facilitador entre los diversos países y grupos de países G-20 y no G-20 para asegurar que exista un diálogo productivo e incluyente.

También se designó a un representante especial para la Presidencia de México del G-20 que ha contribuido a fomentar el diálogo y la consulta con países no G-20.

Por ejemplo, en sus labores de diálogo y consulta ha presentado las prioridades de la agenda y conversado con los representantes de diversas organizaciones regionales de África, América Latina, el Caribe, Europa y Asia. Además, ha tenido diversas reuniones con miembros de la sociedad civil, cámaras de Comercio, líderes de opinión y miembros distinguidos de la academia, y con representantes de organismos internacionales tales como la ONU.

La respuesta a los esfuerzos de difusión y consulta ha sido muy positiva. Un comentario general ha sido que la agenda del G-20 es adecuada y que se centra en los principales desafíos que enfrenta la economía global tanto de corto como de mediano plazo. Cada uno de los diferentes países o agrupaciones consultadas dentro del proceso de divulgación y consulta ha encontrado en la agenda del G-20 un tema que toca sus intereses particulares. Por ejemplo, existe mucho interés en la labor que está haciendo el G-20 para promover el crecimiento y desarrollo sustentables, las acciones para el fomento de la infraestructura, la inclusión financiera, la mejoría en el diseño y el tamaño de la red de seguridad financiera global, el crecimiento verde, el financiamiento para el cambio climático y la volatilidad de los precios de los productos básicos.

El diálogo y la consulta están proporcionando información valiosa para una mejor comprensión de la naturaleza del G-20 y para que los países no miembros se formen una mejor expectativa acerca de lo que puede hacer y lo que no puede hacer el G-20.
Tener mecanismos eficaces de divulgación y consulta resulta fundamental para fortalecer la legitimidad de las decisiones adoptadas por el G-20 al asegurar que los países no miembros participen de alguna forma en el proceso y se sientan representados.